martes, septiembre 26, 2006

mediodía

la luz sale de muchas partes como raíces que se expanden desde miscroscopios, como la luz de estos pies que avanzan y se voltean para mirar las marcas del pantalón que se arrastra por el piso.
me gusta mirarla y tocarla. me gusta que la luz baje de montañas verticales y me recorra a las once de la mañana. me gusta que los árboles me cuenten lo que ven en ella (que no es sólo sombras), y que mis manos -ansiosas y con miedo- la toquen y la guarden con recelo en un baúl.